El verano ya llegó y con él ¿quemaduras solares? Para eso estamos siempre aquí! Para enseñarte a como protegerte de este enemigo de tu piel, para que sepas por qué debes hacerlo y para que elijas correctamente el solar adecuado. ¡Comenzamos!
Lo primero y más importante que debes saber es los tipos de radiaciones que alcanzan tu piel cuando te expones al sol. Estos son 3:
- UVB (ultravioleta B): Son las más superficiales responsables de las quemaduras y las que hacen que se broncee tu piel.
- UVA (ultravioleta A): Son las que penetran más en la dermis y las más fototóxicas, produciendo alergias, envejecimiento prematuro de la piel y cáncer ya que producen los radicales libres tan perjudiciales.
- IR (infrarrojos): Responsables de la sensación de calor en nuestra piel haciendo que ésta se vuelva más sensible a las dos anteriores.
Todas ellas forman un equipo que afecta a nuestra piel lenta y progresivamente con cosecuencias nada saludables ni estéticas, y además todo este daño se acumula año tras año.
¿Qué podemos hacer entonces? La respuesta está clara, utilizar productos con protección solar durante TODO EL AÑO, pero especialmente en verano. Está bien, hablemos pues de los protectores solares que tan necesarios son.
Lo primero y más importante, debes buscar siempre un producto de calidad que sea de AMPLIO ESPECTRO, esto quiere decir que ofrezca protección frente a UVB, UVA y si puede ser con antioxidantes como la vitamina E, mucho mejor.
En los envases veremos que hay un término, FPS o SPF (factor de protección solar), lo que nos indica es el número de veces que se incrementará la capacidad de la defensa natural de la piel frente a la reacción de nuestra piel al sol. Un FPS inferior a 15+ podrá proteger frente a quemaduras pero no garantiza la protección frente al cáncer, por este motivo nosotros siempre recomendamos un mínimo de FPS 30+. También veremos protectores solares con resistencia al agua, según las últimas regulaciones, un protector de estas características debe mantener su eficacia tras 40 minutos bajo el agua, nosotros siempre recomendamos repetir la aplicación a los 30 minutos para evitar sorpresas. Además es muy importante realizar la aplicación 30 minutos antes de la exposición solar para dar tiempo a la eficacia del producto.
Ya hemos dado un pasito más y llevamos mucho aprendido, pero ¿qué sabemos sobre la composición de estas cremas? ¿ Qué son los llamados filtros solares? Pues bien, existen tres tipos:
- FILTROS QUÍMICOS: Lo que hacen es penetrar en nuestra piel y absorber la radiación ultravioleta protegiéndola. Uno de estos filtros es el llamado Mexoryl®, éste es el utilizado por la marca Vichy y se trata de un sistema filtrante de amplio espectro UVA-UVB, fotoestable y sin parabenes.
- FILTROS FÍSICOS: Minerales que crean una pantalla en nuestra piel reflejando la radiación y protegiéndola. Son filtros más pesados por lo que las texturas pueden ser más densas, a pesar de esto, son los más recomendados para pieles muy sensibles y alérgicas. Sin embargo, Isdin ha creado el primer filtro físico que se funde con la piel, Fusion Fluid Mineral 100% filtros minerales.
- FILTROS BIOLÓGICOS: Por sí solos no protegen la piel de la radiación, son antioxidantes que unidos a los anteriores evitan el daño celular de la piel evitando los radicales libres y aumentando la inmunidad de la piel. En este grupo encontramos la vitamina E y A. El tocoferol es uno de los componentes de la gama Anthelios de La Roche-Posay, un compuesto orgánico que actúa como vitamina E.
Qué debes saber:
- Desde las 12h hasta las 16h la intensidad e la radiación solar es máxima
- Cada 300m de altura aumenta en un 4% la capacidad de lesión de las radiaciones
- La arena, la nieve y el agua actúan como espejos reflejando la radiación y aumentando la incidencia de la misma sobre tu piel.
- Los cosméticos como las colonias pueden producir manchas si nos exponemos al sol con ellos.
- La caducidad de los protectores es de 1 año después de haberlos abierto.
- Las nubes disminuyen sólo un 10% de las radiaciones.
- Debes repetir la aplicación de la crema cada 2 horas para mantener la efectividad.
- Existen medicamentos fotosensibles que pueden hacer tu piel más sensible al sol, pero de esto hablaremos en el siguiente post.
Solo queda decir… ¡Sonríe y se feliz!